Etsuko-Eira

Un dia algun día nos daremos cuenta de que somos tan grandes y estamos tan podridos por dentro como para estar en este mundo, pensó una voz con un aire sombrio y taciturno. No importaba quién era, su propia esencia estaba a punto de ser fundida. No importaban sus pensamientos, aunque serían la clave para poder mejorar de una buena vez. Morir para nacer. Nacer para vivir. Vivir para soñar. Soñar para morir. Sus pasos resonaron en las paredes, en el techo y hasta en el aire rebotaron como una clara exclamacion de alerta hacia algo que no pertenecia alli. Sin embargo siguieron los pasos, conscientes de su pobre bi